25 febrero 2006

DESPUÉS DE LA CALMA





DESPUÉS DE LA CALMA





Propongo la palabra como arma silenciada.
Propongo escuchar antes de derramarla.
Dispararle a la noche con el mundo que se apaga.

Propongo más, por si todo esto falla,
arrebatarle al horizonte el silencio de los labios.
Sueño a sueño.
Pero aquí, no. Ni bajo la ola que se acaba.
En otro mundo cuando nazca
esa mano de la tierra,
y la herida desaparezca.

Propongo la palabra como alma silenciosa.
Propongo aplastar el silencio contra el muro de las sombras.
Taladrar la distancia, colarnos por sus cuencas.
Detrás vendrán los ojos, simulando ceniza bajo las piedras.
Pero no, no nos engañemos ni apostemos nuestros sueños,
ni calculemos lo que les queda.
Bajo la lluvia vendrá la lluvia a deshacerlos,
Tras el parpadeo de las gotas, el viento
se derramará como el agua, apuntando
hacia esa lágrima que se esconde bajo la hierba.
Propongo la palabra libertad,
y todas las manos que nazcan de la tierra.

16 febrero 2006

LA FUENTE (COMO INTRODUCCION A LA PALABRA)








LA FUENTE
(COMO INTRODUCCION A LA PALABRA)










Quisiera atravesar lo invisible
y llegar hasta el secreto de tus labios.
Sentir tu respiración mientras se agotan mis palabras;
tierra también, como esa arena a la que besabas.
Lluvia a la que te abrazas, mientras aprietas tus muslos bajo el agua.
Quisiera beber de ti, llenar mi vida de ese instante.
Cerrar los ojos y abrirlos bajo tu memoria.
Detener el tiempo en una mano, y en la otra…
Tú, como esa gota de la que me hablas.

15 febrero 2006

NOCTURNO DE LLUVIA





NOCTURNO DE LLUVIA





Cuando me pierdo entre su desnudez,
me gusta robarle al paisaje el eco de su distancia.
Adentrarme en el color de sus labios.
Adherirme a su memoria silenciosa.
Recorrer sus huesos tallados,
su verdad transparente, los latidos de la lluvia,
ese poema que se nos niega apenas tocamos su noche.

Me gusta porque es como entrar en tu presencia,
mujer que devuelves la mirada que deshojas.
Orientarme hacia ti, buscando el horizonte.
Tensar mi mano como grito de la sombra.
Porque nada es, ni nada se te parece.
Azul de labios, blanca fuente.
Como si salieras de este verso.
Tras la lluvia…

14 febrero 2006

JUEGOS DE VIENTO






JUEGOS DE VIENTO







Quisiera dejar el mundo a un lado.
Dedicarme a ti, insistir en ti,
adherirme a lo desconocido,
a tu transparencia;
a esa vértebra de tu piel,
allí donde todo permanece
en estallido.
Quisiera abandonar el mundo,
pero no más allá de tus labios.
Infringir la ley de la gravedad
y absorber su silencio…
Y escuchar, y escucharnos,
antes de arrojarnos a nuestros sentidos.
Quisiera abandonar el mundo
y volver a tiempo,
para refugiarme en ese fuego tras la nieve.
Devuelto a tus ojos.
Deslizarme en tu poesía,
como abrazo,
como sueño que ocupas en tu mirada.
¡Quizás ya entre, quizás no salga!
Hoy, quisiera abandonarme en tus manos,
primero viento, para después llenarlas.
Podría vivir, o podría morir si me dejaras
jugar entre tus sueños, asomarme a tu llegada.

10 febrero 2006

DETRAS DE LAS PALABRAS





DETRÁS DE LAS PALABRAS






Quizás no llegue hasta ti;
quizás me quede en la distancia.
Pero este paso,
este camino,
esta montaña,
esta nube de cadmio, de pájaros silenciados,
de palabras que me llaman, que me atrapan…
¡Qué cercana, qué muralla!
¡Este viento que me hiere,
qué puñal tan azul,
qué antónimo de batalla!

Quizás no llegue hasta ti,
Quizás me quede…
En el agua,
en el suburbio del tiempo,
en la profundidad cóncava con que nos habla..

Pero lo habré intentando, una y mil veces;
me lo habré dejado…
En el mar,
tras ese copo de nieve que late bajo el silencio,
por entre lo que nos sucede a diario,
como ruta de unos labios.

Quizás no llegue, o quizás más tarde;
cuando el tiempo abra mis sentidos
y los libere.
¡Pero hoy no, ni jamás!
Si acaso, detrás de estas palabras,
de este paisaje que se nos escapa…

08 febrero 2006

MIRADAS







MIRADAS






Cierra los ojos y entre tanto…
Devuélvelos sin miedo al paisaje.
De donde vinieron a contarte,
dónde y sin embargo se refugia el horizonte
y como huésped de la noche se nos marcha.

Cierra los ojos y entre tanto…
Ábrelos sin detenerte ni reclamarlos,
mientras arrastras ese segundo abolido
anotándolo como espacio en tu diario.
Porque este hoy nunca estará tan aproximado
como este trozo de mirada.

Y desplegarás lo inimaginable.
Y te confundirás de verso y de mañana.
Y añadirás palabras que quizás nunca vuelvas a usarlas,
como este frío al que te abrazas.

Porque detrás de aquí, el horizonte ni existiría.
Seguiría como cualquier página en blanco;
indescifrable, sin rostro ni habla;
sin pulso, como desnudo, tras la mirada inagotable.

Mírame, tras este segundo
ya nos habríamos convertido en algo,
ese mundo al que le faltan...
Dos miradas, y el desnudo de la noche.

02 febrero 2006

COMO LUNA QUE DESARMAS






COMO LUNA QUE DESARMAS







¿Por qué apareces y desapareces
de repente,
tras el infinito abrazo de la distancia?

¿Por qué sin tu cuerpo nos mientes,
sueñas y deshaces,
atrapada en el aire, tras el silencio de la nostalgia?

¿Por qué no carne, por qué no agua?
¿Por qué noche tras noche nos señalas
hacia esa madrugada, como vacío que nos separa?

¿Por qué?¿ Por qué no habla? ¿Por qué así,
si tan siquiera nos conoces,
ni miras desde abajo, ni pisas esta niebla tan lejana?

¿Escuchas? Quizás esté en tu memoria,
o ya en tu nombre,
ese…que círculo a círculo nos detallas.

¿Por qué no llegas, por qué no abrazo?
¡No como poema, sí como hallazgo,
sin dirigirte a nadie ni a nada!
¡Sólo, como ese verbo que se levanta!
Ya mujer, ya sabor, ya color, ya no distancia.
Como Luna que desarmas.

01 febrero 2006

DIRIGIDO A LA MIRADA




DIRIGIDO A LA MIRADA

(Fotografía de Victoriano Izquierdo)







Quizás mires, y te vuelvas, y ni siquiera la reconozcas;
ni intuyas el color que se desprende tras el silencio de la mirada.

Quizás no sepas como amarla, ni acariciarla,
caminar bajo su oscuridad, bajo la intensidad con la que te habla.
Cuando te llena de preguntas,
bajo el neón que se prolonga…
Del rojo al naranja,
del verde al que ni adivinabas.

Quizás no sepas, porque nunca te habla,
de poemas ocultos bajo el viento abolido de la muralla,
del laberinto derramado sobre el espejo del asfalto,
de amantes que quizás no vuelvan para cuando se levanten,
transformados, ya, en el diario de unos labios.
De su regreso tras el color del sueño,
de la noche indeleble y salvaje.

Quizás mires, y te vuelvas por donde viniste,
apretando el olvido de lo irreconocible.
Como parpadeo de esta noche, no te vayas.
Acércate, acércate, acércate, un poco más al aroma del instante.
Como si fuera ésta la primera vez que te salen al encuentro,
esta ciudad, y todo lo que te imaginabas…
De momento, esta calle que se dirige hacia tu mirada.