27 enero 2006
MONTAÑA ENROJECIDA
MONTAÑA ENROJECIDA
Aquí está la montaña, ni tan lejos, ni vencida.
Aquí está la montaña, enaltecida, blanca y dorada;
circundada por el azul de la escritura.
Allí voy y de allí vengo.
Como hombre invisible que se acerca.
Como pájaro tras el eco de la niebla.
Silencio a silencio, me repito.
Me dirijo a ti misma, como voz;
como tejido sin tiempo ni memoria;
como paso y criatura de la tierra.
Aquí estoy, abrazado a tu paisaje,
en medio del eco y de la piedra.
Pero yo busco tus labios…Tu sed
cuando me abrazas con el aire.
Pero tu buscas mis ojos…Mi mirada
cuando te abrazo como el agua.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario